El Colegio de Profesionales en Orientación hace un llamado a las autoridades del Ministerio de Educación Pública para que reconsideren y echen marcha atrás, en el cierre de plazas de Orientación que se viene presentando desde el 2023.
No es de recibo que las autoridades ministeriales tomen decisiones tan arbitrarias, cuando son evidentes las necesidades que se han presentado en las instituciones post pandemia, tales como: las situaciones de violencia, acoso escolar, conductas suicidas, consumo y tráfico de drogas, entre otras. Lejos de disminuir el número de profesionales se requiere por el contrario, reforzar su presencia para que puedan acompañar y prevenir estas problemáticas tan serias que afectan a nuestra juventud.
La Orientación como disciplina científica es necesaria en el ámbito de las instituciones educativas. Esta disciplina incide en la permanencia y el éxito escolar del estudiantado y cumple dos propósitos fundamentales:
- Fungir como un proceso que promueve el desarrollo pleno de la personalidad enfatizando la formación de conocimientos, habilidades, actitudes y valores para que afronte los desafíos de la vida en términos educativos, vocacionales y socio afectivo. 2. La persona profesional de orientación es un apoyo clave como ente especializado en el proceso de la toma de decisiones para afrontar situaciones en el medio escolar, familiar, social y laboral, con sentido de responsabilidad, productividad y autorrealización, a nivel personal y social.
Es vital extender los servicios de Orientación a todas las modalidades educativas, priorizando los centros de preescolar, escuelas y centros de educación especial que aún no cuentan con este servicio. De igual manera, lo correcto es ampliar la cobertura existente en los colegios, para garantizar a la población una educación y un desarrollo más integral.
La ley fundamental de Educación en el artículo 22, inciso “a” establece que el servicio de orientación promueve el buen desarrollo emocional y social. Basarse en argumentos cuantitativos no tiene relación con lo que promueve en la política educativa en donde el humanismo debe ser un pilar para la toma de decisiones.
Nuestra Constitución Política en el Título VII, Capítulo Único, artículo 77 estipula que la educación Pública debe ser “organizada como un proceso integral correlacionado en sus diversos ciclos, desde la preescolar hasta la universitaria”. Las autoridades con poder de decisión no deben invisibilizar el momento crucial que está experimentando nuestra educación.
Por tanto, al amparo del interés superior de la persona menor de edad, consignado en el artículo 5 del Código de la Niñez y la Adolescencia demandamos que se vuelvan a nombrar a los profesionales de orientación, en las plazas de las instituciones educativas en la que fueron eliminadas con el fin de proteger y validar los derechos de las personas estudiantes.
El colegio mantiene comunicación con SINAPRO y el Departamento de Orientación Educativa y Vocacional del MEP (DOEV) para dar seguimiento al tema.
Nos ponemos a la orden como colegio profesional para aportar en el análisis científico del RATIO (cantidad de estudiantes por profesional) que está definido actualmente y establecer nuevos rangos, de acuerdo con estudios actuales según las necesidades del estudiantado.